Nuro presentó la tercera generación de su vehículo de reparto, el R2, trabajado en colaboración con BYD y que está listo para fabricarse a gran escala.
La innovadora compañía Nuro, fundada en 2016 por 2 exingenieros del equipo de coches autónomos de Google, tiene como objetivo lanzar el mejorvehículo totalmente autónomo para el reparto de productos.
Muchas empresas han mostrado interés en el proyecto y vienen colaborando, ya sea con inversión financiera o comprando anticipadamente unidades, como la cadena de pizzas Domino’s, la compañía de delivery Kroger, la cadena de tiendas por conveniencia 7-Eleven y la compañía de envíosFedEx. Incluso Toyota, a través de su fondo Woven Capital, invirtió una gran cantidad de dólares en Nuro.
El equipo de Nuro afirma que la tercera generación del modelo R2 está casi lista para ser fabricada en importantes cantidades. El vehículo incorpora un airbag externo colocado en la parte delantera para reducir el impacto y las lesiones en los peatones en caso de colisión. El área de almacenamiento tiene capacidad para 765 litros de volumen y 225 kg de peso y está dividida para diferentes productos, cada uno con su propio sistema de temperatura, que va desde -5,5 ˚C hasta 47 ˚C. Puede circular a una velocidad máxima de 70 km/h. También, incorpora una pantalla táctil que permite que el vehículo actúe como un mercado móvil.
Sus desarrolladores aseguran que este nuevo vehículo utiliza electricidad 100 % renovable, procedente de parques eólicos de Texas, para reducir su huella de carbono global. Equipa una red de sensores multimodales, que incluye cámaras, radares, lidar (sistema que determina la distancia entre objetos a través de un láser) y cámaras térmicas, para crear una visión de 360º. Sus sensores pueden limpiarse solos, automáticamente, y conservar la sensibilidad durante todo el día. Es capaz de percibir la diferencia entre un árbol, una mascota y una persona y puede contar cuántos peatones hay en una esquina, así haya niebla densa.
La asociación entre Nuro y la compañía china BYD incluye el desarrollo del hardware del sistema autónomo y las baterías, así como la colaboración en la fabricación y en las pruebas del vehículo.
Está entre los planes construir una fábrica y una pista de pruebas en Nevada, de donde saldrían miles de estos vehículos para poder dar el servicio de reparto a todo Estados Unidos.